Nuestro Microbioma y la inmunidad
La lectura del Blog no reemplaza a la consulta médica, si fuera necesario acudir a su Centro de Salud.
Generalidades
Conforme pasa el tiempo hemos rescatado estructuras que eran consideradas como relleno de nuestros órganos, tal es el caso del tejido conectivo que ahora se la considera como el órgano más grande de nuestro cuerpo y sumamente importante, pues es la vía de comunicación más extensa y rápida de nuestro organismo. Aquí están todos los receptores celulares con las moléculas necesarias para que cada una de las células de nuestro cuerpo esté enterada de lo que pasa dentro y fuera de cada una de ellas, de otra manera: todas las células están comunicadas entre sí. La manera de comunicarse se hace mediante hormonas, neuropétidos. Interleukinas etc. Este sistema de comunicación es vital para la vida. Este lenguaje también es usado por unidades biológicas más pequeñas como las bacterias. Comparto el trabajo del Dr. Alfred Pischinger padre de estos estudios, del espacio extracelular, en la Revisión que hace Tomás Álvaro Naranjo y sus adjuntos. Para ampliar los dicho acerca de la comunicación entre bacterias dejo la nota de M. en B. Ángeles Pérez Oseguera con el tema ¿Se comunican las bacterias? .Existen otras estructuras a las que nunca se les dió el papel que ahora tienen, me refiero al Microbioma humano formado por: bacterias, hongos y virus que viven en nosotros. Si bien conocíamos algunos microorganismos benéficos como las levaduras que fermentaban las masas del pan, las cervezas y los vinos. La mayoría de nuestros conocimientos de los microorganismos estaban relacionados con enfermedades que diezmaban al ser humano en diferentes épocas como: tuberculosis, viruela, peste bubónica, malaria., rabia. VIH etc. Sin embargo ahora se asume que las enfermedades aparecen cuando un microbio de vuelve agresivo para supervivir, en la piel, intestino o cavidad, ya que su hospedero no lo alimenta adecuadamente y los sistemas de control inmunitario y de autocontrol de las colonias bacterianas fallan. Es el estudio del Microbioma humano que inició a verse la importancia de nuestros microorganismos en el mantenimiento de la salud de las personas. Ahora se sabe de la importancia de una correcta flora para mantener la salud, mantener nuestra inmunidad. La prueba máxima es cómo estos microorganismos pueden protegernos de algunas neoplasias o inducirlas cuando las bacterias han sido diezmadas por el abuso de los antibióticos, hasta ahora en exploración.
Para completar la idea de la importancia de las bacterias en el ser humano es que compartimos ADN mitocondrial, que fue una bacteria que se incorporó a nosotros hace 1,500 millones de años y no olvidar que sin cianobacterias no hubiera existido oxígeno en la proporción que tenemos en nuestra atmósfera y que permite la vida que conocemos.
En lo referente a la inmunidad, se sabe que 80% de la vigilancia inmune se realiza en nuestro intestino. La compleja actividad de la digestión es realizada por todo un sistema de neuronas que dirigen el proceso, por eso se considera que debido a la cantidad de éstas, se las denomina el segundo cerebro. Los grandes y pequeños pasos de la digestión se realizan sin intervención directa del SNC, pues tenemos el Sistema Nervioso Entérico (SNE).Se sabe que el 80% de la información del nervio vago se dirige al cerebro y sólo 20% es información del cerebro al intestino. El sentir mariposas en el abdomen es sólo el bullir de las neuronas, cuando estamos en un momento de estrés.
Microbioma e inmunidad
Debido a la importancia de la noticia el 19-12-2015 traté la noticia del Microbioma Humano, la cantidad de dinero invertido para secuenciar ADN de todas las bacterias en un número importante de voluntarios. Todo esto fue dirigido por el Dr. Joshua Lederberg.
Como se escribe en anteriores párrafos la complicada función digestiva de los alimentos es independiente y la realiza el SNE, las primeras reacciones inmunológicas de defensa se realizan en epitelio digestivo. Allí se encuentran gran cantidad de tejido linfático, células presentadoras de antígenos y polinucleares. No es infrecuente ver linfomas que se originan en el intestino. Dejo el artículo de revisión, escrito por Pedro Alarcón y colaboradores, publicado en la Revista Médica de Chile vol 144, número 7 Santiago, Julio 2016,con el título “Rol de la Microbiota intestinal en la regulación de la respuesta inmune.”
Recomendaciones
Faltan muchas investigaciones en el campo del Microbioma Humano para poder saber las múltiples relaciones entre los seres humanos y sus bacterias. Una buena flora bacteriana digestiva, de piel y de cavidades nos mantendrán sano. Se sabe que se potencia esta flora bacteriana con el uso de probióticos en la dieta natural. Se sabe que las floras bacterianas sufren cuando se mal usan los antibióticos y los médicos no indican probióticos como una medida de salvataje intestinal. Otro tóxico mortal para nuestra flora bacteriana es el uso desmedido de los hidratos de carbono, especialmente los refinados y peor aun los que vienen escondidos en los productos elaborados o procesados, pues en los insertos van con números u otros nombres. He recomendado mucho que se vuelva a la manera de cocinar de antes, lo que nuestras madres o abuelas nos preparaban. La excusa del tiempo no tiene lugar si de por medio está la salud de la familia. Otro daño que hacemos a la flora bacteriana es con las bebidas gaseosas, por el alto contenido de dulce. El dulce es preferido por las células cuando pierden su control de otras bacterias y se transforman en patógenas. Otras de las formas de obtener bacterias patógenas es con el uso de carnes obtenidas con uso de antibióticos con criterio profiláctico en sus centros de crianza, situación que no nos informan al venderlos y a la falta de control. Todo está en sus manos, Ud. paga para enfermarse.