El anterior tema se refirió a la Homeopatía y la utilización de medicamentos en diluciones bajas, así como la activación de estos principios activos. Ahora toca hablar de la Homotoxicología, término que desarrolló Hans Heinrich Reckeweg, Berlín 1905-1985, fundador de la escuela médica Antihomotóxica que logra plasmar las aspiraciones de hacer llegar sus ideas, al crear su propia escuela médica con bases homeopáticas y explicaciones de avanzada, al considerar a las enfermedades como un mecanismo de defensa biológicamente orientados a combatir las toxinas endógenas o exógenas, que diariamente consumimos y que perturban nuestro espacio extracelular.
Pero para entender el tema, tenemos que ir al maestro Alfred Pischinger, Austria 1899-1982, que le dio valor al olvidado tejido conectivo o espacio intercelular, pues la mayoría de nosotros, se formó en la idea de que la microcirculación, era la encargada de llevar nutrientes y recoger desechos del metabolismo de nuestros tejidos directamente de la célula , sin embargo él
demostró la importancia vital que este espacio tiene para nuestra salud. Se lo considera como uno de los fundadores de la Histoquímica.
Básicamente nos enseña la manera cómo el espacio intercelular, es capaz de conectar a la célula con el medio externo y hacer que ante el estrés, el organismo funcione como un todo. Demuestra que este espacio constituye el nivel básico de defensa inespecífica de nuestro organismo y demuestra, además, la potencialidad de las células blandas 
indiferenciadas, reticulocitos o fibroblastos del espacio extracelular, de los capilares y del plexo de fibras vegetativas nerviosas terminales, de coordinar una respuesta inicial, ante cualquier agresión que ponga en peligro la integridad de nuestro organismo.
La salud consiste en tener estos mecanismos de limpieza, vistos en la gráfica, funcionando adecuadamente para eliminar los tóxicos que diariamente producimos o ingerimos.
Ud. dirá, que no ingiere toxinas, pero le haré recordar que los alimentos con herbicidas, fungicidas, preservantes, conservantes, anilinas y toda sustancia química o bioquímica, que actualmente consumimos en los alimentos diariamente, son sustancias extrañas al cuerpo, por lo general no naturales, que deben ser eliminados diariamente para que no bloquee este vital espacio y obstruya la buena salud de las células.
Vemos en la gráfica que los procesos de intercambio, se realizan en los espacios intercelulares y que no existe una conexión vascular directa con las células, sino que todo el intercambio se realiza en los espacios extracelulares, mediante micro túbulos omnidireccionales, colágeno, que ponen en comunicación a todos los órganos entre sí, incluso a las células, con sus respectivos mediadores. La capacidad de respuesta es más rápida, incluso, que la del sistema nervioso central, toda esta red se la llama matrix. Desde el punto de vista evolutivo este sistema de comunicación es más antiguo que el propio sistema nervioso central, que aparece posteriormente en la escala evolutiva.
Para completar el entendimiento de esta parte del tema, recomiendo ver al Dr. Martín Bosch con el título de “Sin acidez no hay Cáncer “, publicado en YouTube.
En este campo de medicina de la escuela alemana y austriaca, destaca el Dr. Otto Warburg,Alemnia, Premio Nobel 1931 de Medicina, que nos dice que cuando falla el sistema de drenaje en el espacio intercelular, matrix, se produce un cambio, del saludable medio alcalino, al medo ácido que condiciona a alguna células a cambiar su metabolismo para supervivir, pasando de la respiración aeróbica a la respiración anaeróbica característico de las células neoplásicas ,que se produce cuando todos los mecanismos de compensación de limpieza de la matrix han fallado.
¿Cómo esta lectura podría ayudarnos a estar sanos?
A los Oncólogos nos formaron que el tratamiento actual es multidisciplinario, donde concurre la Quimioterapia, Cirugía y Radioterapia en el tratamiento de la mayoría de neoplasias. Otras disciplinas, como la Inmunoterapia, vinieron con el desarrollo de la Medicina Oncológica, esencialmente. Sin embargo los niveles de curación son bajos cuando lo comparamos con los obtenidos en Europa o en Estados Unidos. Sólo por cultura general se sabía de la posición del Dr. Warburg, pero nunca nos detuvimos a analizar su pensamiento, pues estábamos parametrados a pensar sólo en una determinado línea de pensamiento oncológico, se logró silenciar al Dr. Warburg.
Una de las razones para obtener niveles bajos de curación en cáncer, en nuestro país, es que éste llega a los especialistas, con mucho tiempo de EVOLUCIÓN, en estadios clínicos avanzados, donde ningún programa de recuperación puede obtener grandes logros y ahora estaremos peor debido a la reducción de presupuestos en MINSA, que incidirán directamente sobre los pacientes. Así estamos en Salud Pública, donde no hemos podido detener al Dengue y la TBC tiene más casos de multidrogo resistencia.
El aumento del cáncer y enfermedades autoinmunes a nivel mundial tendría, que ver con los niveles más altos de contaminantes en el medio, la ingesta de alimentos no aptos para nuestra salud y por habernos olvidado de comer natural, como lo hacían nuestros ancestros.
Los alimentos procesados traen muchos contaminantes a nuestro organismo y los debemos retirar de nuestra dieta.
Es difícil enfrentarse a todas los medios masivos que estimulan el consumo de estos alimentos, que ha influido mucho en varias generaciones, en su manera de pensar, sino pregunten a nuestros parientes más viejos por el uso de la leche de vaca, que ahora está prohibida para menores en algunos países, debido a sus efectos tóxicos en nuestro organismo.
La Industria gasta millones en propaganda y cuenta con especialistas en la comunicación y con Psicólogos, para promover su consumo mediante técnicas especiales, pero de por medio está nuestra salud que la debemos conservar desde nuestra niñez. Sólo ver la dificultad que tienen los políticos en sacar? la Reglamentación de la Ley de la Comida sana para la niñez, por intercurrencia de intereses comerciales.
Se habla de la cándida idea de que hay que dejar que el niño desarrolle su libre determinación, cuando los padres somos los encargados de velar por la salud de nuestros hijos o nietos y el consumismo es alentado por todas partes, especialmente por la contaminante TV que ven nuestros niños.
¿Qué hacer ?
Acordarse de lo se ha escrito en esta columna, el niño debe comenzar a comer desde los 6 meses de edad complementando la lactancia materna, nunca llenarlo en esta fase pues les estamos enseñando nuevos sabores y texturas y si nos excedemos, su inmaduro estado inmunológico podría verse alterado. Más grande, nunca servirle comida en plato grande, pues es mejor preguntarle si desea más o ya está satisfecho, cuando sea mayor se lo agradecerá, pues sabrá comer la cantidad necesaria.
Busque los mejores productos naturales, de preferencia que no hayan sido sometidos al uso de sustancias químicas. Acostúmbrelos a tomar leche de almendras o de soya, a partir del año de edad. Use proteínas animales de buena procedencia, mejor si Ud. las produce, menestras, frutas y verduras siempre. Nunca hacer gestos de desagrado ante un alimento, pues será replicado por los niños y se iniciará un círculo vicioso. Líquidos a voluntad, de acuerdo con la sed. De esta manera conservaremos la alcalinidad de nuestra matrix y alejaremos muchas enfermedades o curaremos mejor nuestras dolencias.
